"DESAFÍO AL PODER"
Layda Sansores San Román
dice que desde niña aprendió a decir lo que piensa y a dar la cara cuando
expresa verdades que incomodan a otros. Para la Senadora de Movimiento
Ciudadano (MC), hablar no es sólo emitir palabras: significa la oportunidad de
demostrar la libertad de una persona, y ella aprovecha muy bien cada
oportunidad para gritar al mundo que es libre de decir lo que piensa.
Texto: David Martínez
Huerta/Fotos: Francisco Cañedo/ SINEMBARGO.MX
Por eso, la legisladora
que no tuvo empacho en decirles a los senadores que estaban a punto de abrir el
sector petrolero a los capitales privados, en plena discusión de la Reforma
Energética: “Pero si quieren realmente que haya una privatización a fondo,
vayan a privaticen a la puta madre que los parió. Y eso sería mucho mejor que
lo hicieran, porque al menos esa es suya, esta patria no les pertenece”.
Parafraseó un texto del Premio Nobel de Literatura, José Saramago.
Tampoco se anduvo con
medias tintas para invitar al Secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, a
utilizar el pódium opuesto al que ella empleaba durante la comparecencia del
funcionario, en septiembre pasado, para poder verlo a la cara cuando le mostró
un cartel hecho por una ciudadana con la leyenda: “No se hagan pendejos, no
necesitamos tantas reformas. Lo único que necesitamos es que dejen de robar”.
Layda Sansores conoce muy
bien ambas caras de la política mexicana. Ha tenido la fortuna de probar, como
legisladora, la miel de pertenecer al partido en el poder mientras militó en el
Partido Revolucionario Institucional (PRI), así como la hiel de la lucha
constante y a veces infructuosa de integrar las filas de la izquierda.
Como priista, fue Senadora
por Campeche de 1994 al 2000. Como integrante de la oposición fue electa
Diputada federal por Convergencia de 2006 a 2009 y Senadora, ahora por
Movimiento Ciudadano, para el periodo que termina en 2018. Esta cercanía con
dos realidades distintas le permite hoy tener una clara radiografía del momento
histórico del Poder Legislativo en medio del regreso del PRI al poder, así como
del ánimo reformador del Presidente Enrique Peña Nieto.
“¿Cuál equilibrio de
poderes? Es verdaderamente una subordinación al Ejecutivo. El Presidente de la
República sigue siendo el verdadero dueño de todo. Él solo se arrodilla ante su
verdadero dios, que son los medios y los poderes fácticos. Antes iba Televisa,
a Los Pinos a hacerle la entrevista. Ahora van ellos [los Presidentes], todos
humildemente”, dice la legisladora en entrevista para Sin Embargo.
Para ella, el liderazgo
del coordinador parlamentario, el pastor, está en que nadie salga del rebaño.
Para eso tiene a su disposición “toda la lana del mundo, lo que cueste”. Por
eso es que están tan bien aceitados los controles de conciencias en las
cámaras. “El Congreso tiene rituales que se cumplen al píe de la letra. Se
cuidan más las formas que el fondo. Pero cada vez estamos peor: yo creo que
estamos sufriendo una degradación. Antes había un pastor por cada bancada. Hoy,
el licenciado Emilio Gamboa [coordinador del PRI en el Senado], es el pastor de
todas las fracciones”.
"EL FIN DE LA IDEOLOGÍA DEL
PRD"
Cada día es más común que
los legisladores cambien sus ideologías en nombre de intereses, dice. Sin Embargo
Layda Sansores recuerda que en su primera incursión como Senadora, tenía la
idea romántica de que podía subir a tribuna cuando quisiera. Hoy conoce las
reglas del ritual, sabe que no es casual que un legislador haga uso del
micrófono, si no es con el permiso del líder parlamentario, y sabe que, por lo
general “son las mismas estrellitas” cercanas a los coordinadores legislativos.
Asimismo, relata que cada
día es más común que los legisladores cambien sus ideologías en nombre de los
intereses. Así lo expresó públicamente el 30 de octubre, en medio de la
discusión de la Reforma Hacendaria en el Senado de la República. Esa noche,
Layda Sansores criticó duramente a los perredistas que aprobaban la iniciativa
peñista que incluía eliminar productos exentos de IVA e incrementar el cobro de
este gravamen en las zonas fronterizas, a cambio de beneficios presupuestales
en el Distrito Federal y Guerrero.
“En un afán de pragmatismo
político se olvidan de compromisos históricos que les dieron bases y sustento
para que la izquierda tuviera escaños en este Senado, me dio mucha tristeza
verlos tan modositos tan obsecuentes. Esos no son los perredistas que yo conocí
y que me enseñaron de política. No entiendo cómo pueden ir en contra de la
reforma energética y estar a favor de la fiscal, por favor, son polvos de los
mismos lodos, son consecuencia de la misma política económica errática”.
La Senadora por Movimiento
Ciudadano lamentó en entrevista que el PRD, que ahora que tiene la fuerza de
quebrar la aplanadora priista, “se le doblen las rodillas” y vote en contra los
intereses de quienes representan. “Y digo qué pasa con los legisladores: cuando
los ves en la calle algunos son verdaderos luchadores sociales, les digo
príncipes de la lucha social, y haz de cuenta que llegan al Congreso y se
derrama el hechizo y se convierten en sapos, mientras dura la legislatura no
hay princesa que pueda hacerlos cambiar.
Hay una mutación de las
personalidades de los legisladores y se convierten en dóciles”.
"LAYDA, LIBRE, REBELBE Y
ENAMORADA"
Layda Sansores San Román
se define a sí misma como “mujer Morena (del Movimiento Regeneración Nacional),
libre, rebelde, enamorada, apasionada, amorosa y valiente”. Su amor está
dedicado a sus hijas y nietos, los motivos de su vida. Otra parte está dedicada
a Romeo, su actual pareja sentimental. Su frase favorita es “las convicciones
exorcizan los miedos”. De su padre, Carlos Sansores Pérez, ex Gobernador de
Campeche, ex Presidente nacional del PRI, ex Diputado federal, ex Senador y uno
de los hombres más cercanos al Presidente Luis Echeverría Álvarez, aprendió que
en política, la verdad se dice con palabras duras.
También aprendió de su
padre a valorar la libertad, los beneficios del trabajo duro, el respeto a sus
propias convicciones y la disciplina para alcanzar metas. “Mi padre era un
patriarca, pero muy integrador. Mi padre se dedicó siempre a la política desde
que tengo uso de razón, pero los sábados y domingos eran sagrados para la
familia. Especialmente los domingos, eran intocables.
Solamente un domingo
recuerdo que lo acompañamos en el coche, fue llamado para acompañar al
Presidente, Luis Echeverría, unos minutos y regresó, pero los domingos siempre
fueron para la familia”, relató.
Su oficina ubicada en el
tercer nivel del edificio del Senado está perfectamente cuidada, destacan los
jarrones con flores grandes y coloridas, fiel reflejo de su personalidad alegre
y vivaz. También sobresale la pared repleta con fotos de sus hijas y nietos. De
sus giras y campañas políticas, así como la foto con Roberto Hernández,
director del documental Presunto Culpable, del cual Layda Sansores fue
productora ejecutiva.
En su casa guarda el Emmy
que la cinta obtuvo. Sentada en la sala de su oficina la Senadora recuerda que
a los 35 años le vino esa explosión de hacer política como su padre. Lo hizo
muy bien, tanto que Carlos Sansores empezó a soñar con convertir a su hija en
Gobernadora de Campeche, mientras ella buscaba abrirse camino político por su
cuenta en la Ciudad de México.
“Cuando llego a Campeche
mi padre ya está organizando todas las redes para que yo sea Gobernadora del
estado, para él fue una obsesión, para mí no, y más porque yo estaba
acostumbrada a hablar con mi verdad. En aquellos tiempos no se acostumbraba que
se criticara al Gobernador, y yo lo hacía todo el tiempo”, relató.
“Recuerdo una vez, después
de que a mi padre le dio la embolia, que llegué a casa y mi padre ya estaba
sentado en una sillita en la entrada y tenía el periódico así sacudiéndolo”,
dice. – ¿Tú dijiste esto del Gobernador? Me preguntó. –Sí papá, le respondí.
–Así nunca vas a ser Gobernadora, me dijo”, evocó, mientras el sol de invierno
se cuela por la enorme ventana de su oficina legislativa.
"VOTO CONTRA EL
PRI-GOBIERNO"
La Senadora Layda Sansores
aseguró que sus hijos la convencieron de votar en contra del alza al del 10 al
15 por ciento del IVA en 1995, propuesto por el Presidente Ernesto Zedillo
Ponce de León. Se siente satisfecha con lo que hizo, aunque eso le valió ser
estigmatizada por el Revolucionario Institucional, lo que posteriormente la
llevó a renunciar al partido en que su padre había militado toda la vida.
Recordó que ese día, en la
sesión celebrada en la antigua sede de Xicotencantl votó en contra del IVA no
como un acto de rebeldía contra su padre o contra el sistema, “yo todavía pensé
que podía rebelarme y salvarla, seguir nadando de a muertito, no, no, no.
Cuando votas en contra de una propuesta del Presidente de la República, sabes
que ese es el final, pero cuando subes a tribuna, ese es el harakiri público,
no hay mañana”, contó con alegría disimulada.
Agregó que en esa época,
para ella fue más duro enfrentarse a su padre, Carlos Sansores, que al
Presidente Zedillo. Recordó que le anunció al ex Gobernador que votaría en
contra del IVA. Don Carlos Sansores, acostumbrado a ejercer liderazgo de
pastor, después de haber sido Presidente de la Cámara de Diputados y del
Senado, intentó negociar con ella.
“Cuando ve que no puede
convencerme, trata de aconsejarme: ’Está bien Layda, salte del salón, así
se hace’”. Y yo le dije ‘no papá, en esto hay que dar la cara’. Él todavía me
dijo, ‘Bueno vota en abstención’. Y yo contesté: ‘No papá, esto es de
definiciones’ y le cuelgo.
Fue un momento durísimo
para mí”, recordó visiblemente emocionada. Don Carlos reconoció posteriormente
su error, “creo finalmente que el equivocado soy yo, que estos son otros
tiempos y que Layda tiene que seguir luchando, el destino no le pertenece a nadie.
Y hoy más que nunca mi solidaridad y mi amor”, le escribió en un fax a doña
Elsa María San Román, madre de Layda para que le diera el recado a su hija.
En este punto, la Senadora
recuerda que inició su etapa final como priista. “Un día me habló Fernando
Ortiz Arana [ex Presidente nacional del PRI]. Yo dije ‘¡Ay! me va a regañar mi
líder’. No, no me regañó, era el réquiem. Me habló para decirme: ‘Layda te
quiero mucho, te querré siempre’. Eran sus últimas flores para mi tumba, porque
nunca más me volvió a dirigir la palabra”, contó.
Sin dejar de ser priista
era una desahuciada, prosigue, “con mis compañeras empiezo a ser la que apesta,
no se querían sentar a mi lado, no las fuera a contaminar. Me cambian de lugar.
Los compañeros hombres por lo menos eran más discretos en sus agresiones, pero
las compañeras mujeres sí fueron muy duras. Y me fueron a sentar junto a La
Tigresa, [Irma Serrano]. Allí aprendí muchas malas palabras y a ser más
combativa”.
“PEÑA TRAIDOR A LA PATRIA”
Layda Sansores se reconoce
fiel integrante del Movimiento Regeneración Nacional y felicita la congruencia
política de Andrés Manuel López Obrador. Para ella, estar en la izquierda le ha
permitido expresar con mayor claridad su pensamiento. “Hoy tengo la libertad de
decir lo que quiero, lo que pienso, aprendí que en política la verdad se dice
con palabras duras, y no me mido. Pero sí sé que todo cuesta y cada vez que me
paro sé que voy a pagar facturas, nada se da gratis, la libertad también se
paga. Antes soñaba con ser libre y hoy soy libre”, sentencia.
Haciendo completo uso de
esa libertad, la Senadora subió a la Tribuna del Senado para defender su
postura en contra de la Reforma constitucional en materia energética, el pasado
10 de diciembre. “Acuso a Peña Nieto de farsante, porque dice que no habrá
privatización, no aparece la palabra privatización en toda la iniciativa.
Claro, esta es una iniciativa tramposa, engañosa, propia de delincuentes, sólo
los tahúres de la política en actos de prestidigitación gramatical, engañando
al pueblo”, denunció Sansores durante el debate de la Reforma Energética.
“En la modificación
constitucional se niegan las concesiones, véanlo bien, pero en otra parte del
texto se otorgarán contratos, concesiones, asignaciones, licencia y hasta
junto, combinado, mañosamente dejaron en los transitorios la posibilidad que
las empresas transnacionales incluyan en sus activos el petróleo y en otro
transitorio está contemplada la paulatina extinción de Pemex”, sentenció.
Esa noche, se lanzó
también contra el Senador priista, Carlos Romero Deschamps, líder del Sindicato
de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana. Lo arengó para que subiera
a tribuna a dar el debate, a defender el patrimonio de los mexicanos, a dar la
cara por los trabajadores petroleros. “Ojala que aunque sea por una vez
escuchemos aquí al Senador Romero Deschamps qué opina de esto, porque aquí lo
hemos visto habitar como un fantasma en un tema tan importante para la nación y
donde el destino de sus trabajadores está en juego”, declaró Layda Sansores, sin ninguna respuesta por parte del líder sindical.